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El Entorno de La Bárcena
Cultura
La visita a Potes es imprescindible, disfrutar de un paseo por el Casco Antiguo, detrás de la calle Cántabra, y contemplar los rincones y plazas que parecen sacadas de un cuento. Otra parada obligada es el Puente de San Cayetano (la vista desde el puente es preciosa) para luego cruzar hacia la calle del Sol, donde llegaremos a una impresionante zona de arcadas de piedra, o la Torre del Orejón de Lamas, ya camino hacia la Torre del Infantado.
El Monasterio de Santo Toribio de Liébana dista sólo 7 Km. Conserva el mayor trozo del Lignun Crucis y copias de unos espléndidos Códices Miniados, cuyos textos del Apocalipsis fueron escritos por El Beato de Liébana.
Mas modesta, pero no por ello menos interesante, es la preciosa Iglesia Mozárabe de Santa María de Lebeña, cuya historia y protagonistas cuenta a la perfección de forma muy amena y simpática la encargada de enseñarla. Destaca además de su arquitectura la piedra del ara del altar con una estela celta, encontrada dentro de la iglesia durante la realización de unas obras.
A tan sólo 4 Km. de La Bárcena, se encuentra el pueblo de Mogrovejo, declarado Conjunto Histórico Artístico, con espléndidos ejemplares de casonas blasonadas y con una preciosa Torre Medieval. Mogrovejo tiene una de las mejores vistas de los Picos de Europa.
También cercanos se encuentran, los preciosos pueblos de Espinama y Pido con buenas muestras de arquitectura popular.
La costa Cantábrica está a tan solo 45 kilómetros, una excursión a San Vicente de La Barquera, Comillas o Santillana del Mar, puede hacerse sin problema aunque para los mas pequeños lo que hará un día inolvidable es la visita al Parque de Cabárceno, considerado uno de los mejores Zoológicos de Europa, tanto por el enclave en una antigua explotación minera, como por la variedad de animales y el extenso terreno del que disfrutan.
Naturaleza
En Los Picos de Europa y en los Valles de Liébana, cada una de las estaciones del año tiene su propia identidad, destacando por su colorido y espectacularidad el Otoño, el Invierno y la Primavera.
El valle de Camaleño donde se encuentra La Bárcena, se caracteriza por tener el acceso mas cómodo a los Picos de Europa a través del Teleférico de Fuente Dé. Su espectacular paisaje de verdes praderas y espesos bosques con los montes al fondo, le garantizan una vista inmejorable de los mismos.
Al resguardo de los Picos, los valles se caracterizan por su microclima de tipo mediterráneo, peculiaridad que explica que aquí dominen bosques de encinas, madroños y alcornoques.
A mayor altitud son sustituidos por robledales, hayedos y abedulares; y ya en los pisos alpinos aparece la vegetación arbustiva de alta montaña. Es destacable el buen estado de conservación de estos bosques autóctonos que ha permitido preservar la fauna característica de la Cordillera Cantábrica, y aunque sus especies mas emblemáticas (el oso pardo, el gato montés, el águila real y el urogallo) son escasas, abundan otras muchas como: el venado, el rebeco, el corzo, el lobo, el tejón, la nutria, la comadreja y el jabalí; en las especies fluviales destacan: la trucha, el salmón y la anguila; y entre las aves: el águila imperial, el milano, el halcón, la lechuza y el búho.
La ganadería es también una de sus fuentes de riqueza, donde distintas razas de ganado vacuno (frisona, holandesa, suiza, etc.) se han adaptado a los pastos de los valles junto a la tudanca que es la raza autóctona por excelencia. También posee la cabaña lebaniega ovejas, cabras y caballos, así como ganado porcino con una importante artesanía de embutidos.
Deportes
Los Picos de Europa son un escenario extraordinario para practicar deportes de montaña en todas sus variedades, desde la escalada con numerosas vías abiertas, hasta rutas mas tranquilas por la red de senderos señalizados de Gran y Pequeño Recorrido (GR y PR), para poder descubrir los distintos valles. En invierno y primavera también se puede practicar el esquí de montaña en las cumbres que circundan la comarca.
La bici de montaña es una buena opción para recorrer los caminos y pistas de los valles y también las rutas guiadas a caballo.
La espeleología tiene también enormes posibilidades, con cinco simas que superan los mil metros de profundidad.
En actividades acuáticas destacan el descenso de cañones y el piragüismo y en las aéreas el parapente.
Gastronomía
La gastronomía de Liébana se fundamenta en la variedad y calidad de las materias primas. Gozan de merecida fama las carnes y embutidos de la comarca, su mejor representación culinaria es el “cocido lebaniego”. Tampoco faltan platos de caza: jabalí, venado, corzo, etc., ni de pesca: salmón y truchas del Deva.
De excepcional puede calificarse la riqueza en lo que a quesos se refiere, con distintas variedades algunas como el Picón de Bejes y Tresviso, el Ahumado de Aliva y el queso de Pido, con Denominación de Origen propia.
Los postres derivados de los lácteos nos ofrecen una gran diversidad: arroz con leche, natillas, frisuelos y el “canónigo”, que pueden rematarse con un digestivo y rico Té del Puerto y un poco de Orujo.
La mejor ocasión para hacerse con los auténticos productos de Liébana es el típico mercado que se celebra los lunes en Potes.
